Convocamos a la gente a las 14hs y en cuanto llegó un buen número de gente nos juntamos en el centro de la plaza para contarles nuestra idea: armar equipos para ir encontrando pistas y personajes por distintas instituciones y rincones del pueblo, pero con la condición de ir tomados de una tela y de no ser alcanzados por los fantasmas mala onda que rondarían la plaza.
La idea gustó y se empezaron a armar equipos, la condición era que hubiera alguna persona adulta en cada equipo y que fueran pensando cómo se trasladarían para que no se suelte nadie (sino serían capturados por alguno de los fantasmas mala onda), ni que se caigan y esas cosas.
Una vez que los equipo estuvieron listos, les dimos la primer pista y salieron, los cinco equipos para lados diferentes.
En algunos lugares la pista estaba colgada y había que resolverla, en otras había personajes que les harían desafíos para poder seguir y, siempre estarían rondando la fantasma naranja y el fantasma rojo...
Más allá de que estuvieron corriendo por casi una hora, era impresionante ver a la gente riendo y jugando con el paisaje de las montañas de fondo.
Al terminar, los equipos volvían a la plaza y allí nos íbamos juntando en unas rondas donde, más allá de las diferencias en los colores que traemos de antes, tenemos que tener en claro que compartimos un mismo lugar y podemos disfrutarlo, juntas y juntos.
Fue genial y muy intenso, hubieron más de 70 personas jugando y otras tantas mirando o acompañando.
¡Gracias por toda esa energia!
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