Desafío en Río Grande

El Viernes 14 de Mayo por la tarde tuvimos una actividad con los jóvenes de la Murga en el gimnasio Muriel. No sabíamos muy bien de qué se trataba, cuántos eran ni cómo estaba conformado el grupo. Habíamos planificado algunos Juegos de Impro que les sirvieran para la puesta en escena: caminar y stops, y variantes, fotos de situaciones de la murga y también juegos para enseñar a los más chicos cosas de la murga: enanos y gigantes, carrera en cámara lenta, islas (bailan murga hasta que se corta la percu y, a las islas), penales, leones y leopardos (bombo uno, platillo el otro), 2 perros para un hueso (y tocar el bombo). También pensamos otras propuestas: ¿Qué quiere decir la murga? ¿Qué tiene para decir? Dividirse en grupos y armar: canciones, escenas, fotos contadas.
Nos encontramos con Gamarra, quien recién llegaba con su grupo de percusión de la murga. La situación era bastante diferente a lo que nos imaginábamos: habían empezado hace poco y sólo había varones en la percusión y no había chicas todavía. Los varones no se animaban a bailar y llegaron pensando que iban a tocar un rato. Hablamos un rato y todo lo que habíamos planificado como opción no nos serviría. De yapa en ese horario iba a haber vóley con las chicas de 1er año del Comercial N°3. ¿Qué hicimos? Juntamos a los dos grupos e hicimos algunos juegos para que se conozcan. Al final el encuentro fue de sólo 40 minutos y jugamos al Cartero, Canasta Revuelta, Apoyos y Patrón de la Vereda + Protegido. Estuvo bueno, si alguien no quería jugar se podía correr, pero en general volvían. Pensábamos cerrar con Aiepo pero no se dejaron más que la primera parte.
Hablamos un rato con Gamarra y con Juanca, sobre la murga, los pibes y las peleas entre barrios. Y que esta actividad sirvió para la integración y para descubrir que pueden compartir cosas juntos chicos y chicas de diferentes barrios. Fue un desafío enorme y creemos que valió la pena el intento, ambos grupos se fueron contentos a pesar de no haber hecho lo que tenían pensado hacer esa tarde.

Les contamos cómo es el "protegido", juego que nos enseñó Seba Martinez. Se comienza similar al patrón de la vereda o pulpo. Todo el grupo está en un lado, tiene que llegar al otro y en el medio está quién los intentará atrapar. Cuando ya son varios los que atrapan, cambia la dinámica. Ellos elegirán a uno del grupo al cual deben atrapar. Si lo atrapan pasa a ser parte de los perseguidores. Si logra llegar al otro lado, entonces gana todo el grupo. Para que esa persona elegida logre pasar, el resto del grupo deberá cubrirla, hacer una estrategia para que no sea atrapada. Si tocan a cualquier otro no pasa nada. Sólo deben lograr atrapar al elegido/a.
Es un juego muy interesante, en donde se elaboran estrategias, se elige siempre a uno diferente y se colabora en la defensa de los compañeros. ¡Pero ojo que puede ser un poco bruto!