¿Y dale que escribimos el primer post?

Empezar es siempre difícil. Sea un blog, un mail, un libro o lo que sea, hay que empezar con la hoja en blanco. Superado ese primer momento, suele pasar que te aparece una cataratas de ideas desordenadas que tenés ganas de escribir pero no todas se relacionan. Y así empezamos a escribir esto.

Ahora sí, a un par de renglones de haber empezado ordenamos un poco mejor las ideas y contamos que este blog nace tras definir que viajaremos por el país compartiendo propuestas de juego y disfrutando de viajar, descubrir y aprender.

El viaje empezó hace bastante, casi un año, cuando sentados en Praia Preta nos dimos cuenta que nos encanta viajar y generar propuestas lúdicas. La idea fue madurando en nuestras cabezas, en empezar a ver qué llevaríamos, a dónde iríamos y hasta que en un momento nos dijimos -¿y si nos vamos a recorrer el país?-, -¿Y dale que llevamos juegos y cosas para compartir?- y todo empezó a tomar otro gustito... Fuimos a aprender a manejar, empezamos a seleccionar materiales, a contactarnos con gente, a contarlo, a escuchar recomendaciones, a convencernos que íbamos a dejar la "gran" ciudad, a planificar, a soñar...

De a poco empezamos a definir ganas, qué cosas sí y cuáles no, nos pusimos a pensar en la libertad, en los sueños, imaginamos cómo son las propuestas tan lejos de donde se transita nuestra rutina y definimos que estaría bueno dejarse llevar, empaparnos de realidades, contagiarnos de las luchas y alegrías de cada lugar, nutrirnos de gente distinta, lejana en la distancia y cercana en energías. Disfrutando, animándose, con otras y otros. Poniendo en juego nuestra creatividad, nuestras ideas, nuestras dudas y certezas, la confianza en las personas.

Estamos seguros que volveremos llenos de esperanza para afrontar la vida de otra manera, desde otro lugar, dándole valor a otras cosas, teniendo mucho para contar.

(12/12/2009)

jueves, 1 de julio de 2010

En el Centro Cultural de Río Turbio

En Río Turbio, se organizaron varios encuentros de juegos en donde se invitó a las escuelas a participar y acercarse al Centro Cultural. El jueves entonces, vinieron chicos de 4to y 5to grado de la EGB 60. Hicimos con ellos, Juegos Cooperativos. Por un lado hicimos la cornisa, patas, quemado protegido y embocar la birome. Estuvo muy bueno. Hicieron un gran esfuerzo por cumplir los desafíos y les costaba no empujarse en la cornisa, por eso creemos que fueron más valiosos estos juegos en particular para este grupo.

A la tarde tuvimos tres grupos. Con los chicos de 1er grado del EGB 68 jugamos a Palo Palito, Cartero, Leones y Leopardos y cerramos con Merequeté. Luego vino un grupo de 1er y 2do grado de la EGB 68 y del Colegio Santa Bárbara. Con ellos jugamos a Ula ula, Cartero, 1, 2, 3, me di vuelta otra vez y cerramos con Tira la Tirita.
Con el tercer grupo hicimos un juego guionado sobre la magia y los miedos: primero les preguntamos a través de un juego qué tan valientes eran, y les contamos una historia. Resulta que cada uno de ellos tenía unas gemas protectoras y cuantas más tuvieran, más protegidos estarían. Entonces se comienzan a desafiar para ganar más de esas gemas. Luego se convoca a los que más tienen para ver quién sería el elegido para decirle el gran secreto de cómo combatir los miedos. Las personas con más gemas suben al escenario y se las desafía hasta que queda uno. Se les revela el secreto que dice los tres pasos para combatir los miedos: atraerlos, enredarlos en una gran telaraña y auyentarlos para siempre cantando todos juntos. Así lo logran entre todos, enfrentándose a los miedos y no quedando paralizados, y con la ayuda de todos los compañeros. Lo interesante de esta actividad es poder juntar juegos diferentes a través de un eje que sirva como hilo conductor de las actividades. Y es muy fácil de hacer, se elige un eje y se buscan actividades que se puedan adaptar a ese eje y que sean pertinentes con el grupo y el espacio y tiempo disponible. Invitamos a todos a hacer el intento, salen cosas buenísimas.

El viernes por la mañana también vinieron dos grupos. Con el primero tuvimos poco tiempo porque llegaron muy tarde, hicimos algunos juegos de ronda. Con el segundo grupo, de 6to grado, hicimos los juegos cooperativos que comentamos anteriormente. Les pedimos que se dividan en dos grupos como quisieran, y quedaron divididos casi en varones y mujeres. Las maestras se sumaron a jugar. Leo se quedó con los varones y unas chicas más grandes y Naty con las nenas. Las nenas jugaron super bien, cumpliendo los desafíos y haciéndonos reír mucho. Los varones estuvieron un poco más difíciles y se la pasaron molestándose entre ellos y pegándose, cosa habitual entre chicos de esa edad pero que obturó bastante la actividad y no les dejó disfrutarla a pleno. Esto nos lleva a un dilema. Porque creemos que si van a ser juegos cooperativos, en los que se tengan que ayudar, es mejor que sean los más amigos los que estén juntos, por ende, que armen ellos mismos los equipos. Pero puede suceder lo que pasó con este grupo… así que, como en tantas otras cosas, ¡¡no hay recetas!!


No hay comentarios:

Publicar un comentario